Arcade Fire salvó mi vida.

Este post debió haberse publicado antes, por lo que ha perdido mucho sentido en mi vida. Pero la intención era, que despuès de días "tristeando" (o enfurruñada de acuerdo a la RAE) lo superé. Mi aprendizaje de ese enfurruñamiento fue que: la música es mi contensión. Logra que explote que tenga que explotar. Me ayuda a concentrarme. Me da los mejores momentos. Es mi motor.

GRACIAS MÚSICA, POR EXISTIR.

El título de este post esta directamente inspirado por la canción de los ochenta Last Night a DJ Saved My Life.

En mi caso definitivamente NO fue un DJ. Ni me salvaron la vida, pero me ayudaron a transicionar de "tristear" a "ya no tristear, seguir con la vida como es." O... como diría Woody Harrelson en Zombieland, "nut up, or shut up."

Me dí cuenta que la misería de otra persona, su sufrimiento convertido en arte... transmite -de una manera muy extraña- esperanza. Nada nuevo, Alain De Botton escribió acerca de esto y yo, ya dí mi punto de vista al respecto.

El caso es que Arcade Fire fue quien me ayudo a salir de mi hoyo.

En la cúspide de su popularidad, no me gustaba. Nada. Me parecían pretenciosos, sobrevalorados. Y quienes los escuchaban ma parecían exagerados en su devoción para con ellos.

Si, si, si. Son tan buenos como lo que decía la gente. No eran para mi en ese momento. Pero más recientemente, me han transformado a escucha ferviente.

Al verlos, circa 2006, me parecían una secta: seis personas, fieles a su líder, cantando canciones cuyas melodías son bonitas. Cayendo en mis anglisísmos, parecen happy-go-lucky. Pero en realidad no lo son. Tienen, o mejor dicho Win Butler, un fondo oscuro. Siento que solo les faltan los panderos (como Polyphonic Spree) para ser, abiertamente, un culto.

Su cantante parece mormón. Change my mind.

Y la gente lo escuchamos, lo sufrimos junto con el, lo bailamos, lo admiramos. Parece, a lo lejos, carismático.

Todas las características de un líder de secta.

Y posiblemente, una de las razones por las que, al iniciar su gira en 2023, salieron a luz acusaciones de "conducta sexual inapropiada". Acusaciones graves, pues todas provienen de mujeres menores de 25 años. Y por las que Feist se deslindo del tour en el que participarían.

Win Butler ha sufrido. Y lo expía a través de sus canciones. Más que cantar, me parece que predica su arrepentimiento / culpa / ira / deseos por los que sabe se irá al infierno por el mundo / desesperación / esperanza. Temas con los que todos nos podemos relacionar en algún momento del día.

Vive el dolor y nos lo hace sentir en su música y letras.

WE can make it if you don’t quit on me I won’t quit on you don’t quit on me WE can make it baby please don’t quit on me I won’t quit on you don’t quit on me I never quit on you

I heard the thunder on a blue sky perfect day I wonder why am I the only one? I heard the thunder and I feel I’m going under Jesus Christ was an only son

Por algo sus canciones son "anthems". No tan populares como para ser LA canción central en una graduación, pero tienen la estructura: letras que -de alguna manera- "empoderan" ( y que se aprenden fácilmente, catchy pues,) melodía "bonita" y bailable. No a manera de slam; me imagino más a un grupo de hippies, meciéndose de lado a lado, al unísono.Dando brinquitos. de vez en vez.

Mi impresión es que los acordes de guitarra tan "dominantes" y "estruendosos", contrastan con los coros (otro elemento de las canciones anthem) y la letra, que denota una sensibilidad a la que muchos les apena aceptar.

De alguna manera, sus canciones liberan tensión. Incluso la manera en la que canta Win. Nos demuestra las lagrimas que ha derramado, las llagas que se ha abierto para llegar a este momento.

Para mi, el acabóse, es la letra. Es lo que me permite entender por qué canta lo que canta y cómo lo hace. Es con lo que logro crear esa relación con el hombre, y no con el frontman. Fue lo que me ayudo a que el "ya pasará" fuera más fuerte que "aquí, ahora." Pensaba: todos la pasamos mal, no importa el lugar que ocupemos en esta banqueta.

Gracias Arcade Fire, por haber llegado a mi vida y ayudarme a superar los días previos a Navidad. La época más estresante del mundo.

¡Feliz Año! y que siempre nos acompañe la buena compañía, el buen vino, la buena comida y la mejor compañía.